El vecino comentó que en el barrio es común ayudar, pero no reciben un trato cordial: “nosotros, en el barrio, estamos acostumbrados a ayudar a gente que necesita, colaboramos con ropa, con mercadería y los mismos a los que ayudamos, son los que vuelven a robar”.
“Tuvimos un caso puntual donde a un chico que estaba yendo a la escuela le robaron las zapatillas, el celular y lo golpearon. Entró corriendo al aula diciendo que lo habían asaltado”, comentó.
El vecino cuenta que si bien hay presencia policial en la escuela, ellos ya saben que hacer, se las ingenian para que no los vean y poder asaltar a la gente. “Ya no les importa la policía, no les importa nada” Sentenció.
“¿Qué tenemos que hacer para que esto acabe? Ya no sabemos como actuar”, expresó, además de mencionar que a partir de las 18:00 o 19:00 los vecinos deben permanecer en sus casas para evitar los robos. Es una ola de robos muy grande que no deja descansar al barrio.
“No podés salir a comprar a las 6 de la tarde, estamos cansados”, eran las palabras desesperadas del joven, “yo quiero que me expliquen ¿qué podemos hacer en el barrio?”, finalizó.
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