El Papa Francisco explicó este 28 de octubre durante la Audiencia General que “Jesús no es un Dios lejano” ya que se encarnó, reza por nosotros ante Dios Padre y “nos invita a rezar como Él rezaba”.
Vicente, Sabina y Cristeta de Talavera fueron tres hermanos mártires que vivieron entre los siglos III y IV, en la península ibérica, en tiempos de la Hispania romana.
San Alfredo, también conocido como “San Alfredo el Grande”, fue rey de Wessex -uno de los siete reinos que integrarían el futuro reino de Inglaterra- desde 871 hasta 899, año de su muerte.
El Obispo de San Rafael, Mons. Eduardo María Taussig, explicó que si bien existía entre los fieles locales la expectativa de que se revirtiera la decisión tomada por el Vaticano de cerrar el Seminario “Santa María Madre de Dios” en Mendoza (Argentina
San Frutos, Santa Engracia y San Valentín fueron tres hermanos eremitas que vivieron entre los siglos VII y VIII, en Segovia (España), en la época de los Visigodos.
“Oh Virgen y Madre de Dios... soy hijo y misionero vuestro, formado en la fragua de vuestra misericordia y amor” decía San Antonio María Claret, cuya fiesta se celebra cada 24 de octubre.
El Catecismo de la Iglesia Católica (1030-1031) señala que “los que mueren en la gracia y en la amistad de Dios, pero imperfectamente purificados, aunque están seguros de su eterna salvación, sufren después de su muerte una purificación, a fin de obt
\"Donde está Jesucristo, allí está la Iglesia Católica\", escribió San Ignacio de Antioquía en una de sus cartas, otorgándole por primera vez a la Iglesia de Jesucristo el nombre de “católica”, es decir, “universal” (de acuerdo al término griego Kath
“Cuando uno ama, todo habla de amor, hasta los trabajos que requieren nuestra total atención pueden ser un testimonio de nuestro amor”, dijo alguna vez Santa Margarita de Alacoque (Francia, 1647-1690).
“Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa, Dios no se muda, la paciencia todo lo alcanza; quien a Dios tiene nada le falta: solo Dios basta”. Estas líneas corresponden a uno de los poemas que escribió la gran Santa Teresa de Jesús (1515-1582), la