Tener agua fresca para los animales en distintas partes de la casa.
No salir a caminar con ellos en horas del mediodía, media mañana o la tarde, solo sacarlos a pasear antes de que anochezca y que no sean muchas horas.
Mantenerlos dentro de casa y de ser posible con aire o ventilador,“compartirles un poco de nuestro bienestar”.
También es buena idea humedecer ciertas partes del cuerpo, como lo son, la cabeza, el cuello, la panza/abdomen, la ingle y las patas, son los lugares más importantes para mantener a un animal fresco. Es recomendable también ponerles una toalla húmeda alrededor del cuello.
Si se nota al animal decaído, que come poco o que jadea mucho, hay que comenzar a enfriarlo de a poco, no hay que ponerles agua helada o hielo porque les podría dar un cambio de temperatura peligroso, lo mejor es mojarles las distintas partes del cuerpo antes mencionadas con agua fría.