Un estudio preliminar de laboratorio llevado a cabo por el Centro Gamaleya demostró que la vacuna Sputnik V y la vacuna monodosis de refuerzo Sputnik Light son efectivas contra la variante Ómicron del coronavirus, ya que proporcionan una mejor protección comparadas con otras vacunas.
El refuerzo con Sputnik Light, afirmaron desde Rusia, es la solución para aumentar la eficacia de otras vacunas, incluso contra Ómicron, y extender el período de protección del refuerzo.
La vacuna Sputnik Light, utilizada como refuerzo, aumenta significativamente la actividad neutralizante basada en sueros contra Ómicron entre dos y tres meses después de la revacunación y es un refuerzo universal para otras vacunas ya que induce una mayor respuesta de anticuerpos y linfocitos T.
Desde Rusia remarcaron que, en los últimos meses, se demostró que "la eficacia de las vacunas de ARNm está disminuyendo, como lo demuestran varias publicaciones científicas".
Y cita un estudio sueco en la revista The Lancet que mostró que la eficacia de la vacuna Pfizer contra Delta cae al 47% después de 4 meses, al 29% después de 6 meses y al 23% después de 7 meses.
El estudio reciente en Estados Unidos entre personas de 65 años o más demostró que la disminución en la efectividad de la vacuna de ARNm se acelera contra Delta después del cuarto mes, alcanzando un mínimo de aproximadamente 20% en los meses cinco a siete.